Obesidad: un enemigo silencioso del sistema inmunológico
DOI:
https://doi.org/10.32870/rtmc.v1i3.25Palabras clave:
obesidad, autoinmunidad, inflamación, adipocinasResumen
La obesidad no solo es un problema de peso, sino que también puede alterar las defensas del cuerpo y aumentar el riesgo de enfermedades en las que el sistema inmunológico ataca sus propios órganos. La acumulación excesiva de grasa provoca inflamación constante, lo que puede favorecer el desarrollo de enfermedades como la artritis reumatoide y el lupus. Además, el tejido graso produce sustancias que afectan la forma en que el cuerpo se defiende. En personas con obesidad, hay un desequilibrio en estas sustancias que promueve más inflamación y dificulta la regulación de las defensas naturales. También se ha visto que los cambios en las bacterias del intestino pueden empeorar este problema. La obesidad no solo facilita la aparición de estas enfermedades, sino que también reduce la eficacia de los tratamientos. Adoptar un estilo de vida saludable es clave para prevenir estos problemas y mejorar la calidad de vida.
