El eje intestino-microbiota-cerebro: Un vínculo clave en la obesidad
DOI:
https://doi.org/10.32870/rtmc.v1i4.42Palabras clave:
Eje intestino-microbiota-cerebro, Obesidad, DisbiosisResumen
Resumen:
Nuestro intestino y nuestro cerebro están conectados y se comunican entre sí todo el tiempo. Esta conexión también incluye a la microbiota, que son los microorganismos que viven en nuestro intestino. Juntos forman lo que se llama el eje intestino-microbiota-cerebro. Esta red influye en cómo digerimos los alimentos, cuando sentimos hambre o saciedad, y también en cómo nos sentimos emocionalmente. Cuando comemos bien, especialmente alimentos ricos en fibra, ayudamos a que las bacterias buenas crezcan y produzcan sustancias que mejoran nuestra salud. Pero si consumimos muchos alimentos con grasas y azúcares, este equilibrio se rompe, lo que puede causar problemas como obesidad, diabetes o incluso depresión. Afortunadamente, existen formas de cuidar y mejorar esta conexión, como el uso de probióticos, prebióticos y otras terapias que ayudan a recuperar el equilibrio del intestino y así mejorar nuestra salud física y mental.